El pasado 27 de septiembre, Monseñor Luis Raúl Sandoval Arenas, cumplió 51 años de ordenación sacerdotal, años que según dice lo han llenado de satisfacciones.
Al efectuarle la entrevista en su acogedor hogar, Monseñor Sandoval, se mostró satisfecho por la visita, así como muy elocuente a pesar de estar delicado de salud.
Una de las primeras interrogantes fue, qué lo ha llenado más de satisfacción durante estos 51 años, y aunque comentó que todos los años dedicados a predicar la palabra de Dios lo llenan de satisfacción, narró un anécdota que para él es muy especial, y que le ocurrió hace muchos en la Iglesia Nuestra Señora del Rosario de Aránzazu de La Rita, cuando monseñor Roa Pérez, lo llama y le dice que se haga cargo de esa parroquia, y al llegar una niña lo recibe con los brazos cruzados y le dice que ellos no quieren a ningún sacerdote en esa Iglesia, cuenta que durante los meses siguientes nadie a iba a misa, se podían contar solo dos o tres viejitas en los bancos de la parroquia, si el caminaba por las calles del pueblo la gente se le alejaba, que había un rechazo total hacia él y todo lo que fuese relacionado a la Iglesia.
Fue entonces cuando decide rogarle al Sagrado Corazón de Jesús, que lo ayude, “yo no podía solo con esa gran tarea” agregó, y continúa diciendo “me lleve a unos muchachos de Cabimas, para que me ayudaran a hacer unas pancartas y las colocamos en diferentes lugares visibles, invitando a la gente, y para mi sorpresa el día de las confesiones la iglesia se llenó, tuve que llamar a unos padres de otras iglesias de Cabimas para que fueran ayudarme, ese día hubo 87 comuniones y se hizo una procesión bellísima, con muchas personas en honor al Sagrado Corazón de Jesús”.
Luego dijo “el Sagrado Corazón de Jesús revivió la Iglesia de la Rita en tan solo cinco meses, ese trabajo lo hizo él, yo solo fue un instrumento.
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