Liliana Ortega, miembro fundador de Cofavic. |
La falta
de institucionalidad e impunidad son algunos de los más problemas de se viven en Venezuela, así lo
afirmó Liliana Ortega Mendoza, miembro
fundador de Cofavic, quien explicó que sin duda alguna que no hay elementos que
afecten más a la sociedad como son la
violencia y la impunidad, y estos son consecuencia del déficit institucional.
Estas declaraciones las ofreció a la
salida de una reunión de la Comisión de Justicia y Paz, efectuada en la sede de
la Conferencia Episcopal de Venezuela.
Como se recordará Cofavic es el “Comité
de Familiares de las Víctimas” de los sucesos ocurridos entre el 27 de febrero
y los primeros días de marzo de 1989, es una organización no gubernamental
dedicada a la protección y promoción de los derechos humanos, independiente de
toda doctrina o institución partidista y religiosa, con personería jurídica
como asociación civil sin fines de lucro.
Al hacer referencia a los hechos
acontecidos luego de las elecciones presidenciales del pasado 14 de abril,
comentó que es urgente que se inicien investigaciones independientes, que no se
politice, ni se haga proselitismo con las muertes de los venezolanos, “no
victimas buenas o malas, por que pertenezcan alguna fracción política” apuntó.
Agregó que
en el país hay una situación de
impunidad generalizada, según cifras oficiales ni el tres por ciento de los
casos llegan a juicio en materia de derechos humanos, por lo tanto sería muy
importante que en esta ocasión debido al nivel de polarización política que hay
en el país, se puedan hacer investigaciones transparentes, que puedan ser conclusivas
y se puedan determinar responsabilidades.
El desamparo promueve la violencia
Ortega
agregó que desde Cofavic, creen que se haría un enorme favor a la sociedad y se
abrirían espacios democráticos y al diálogo, si las instituciones cumplen con
su deber de ser neutrales e institucionales, que todas las victimas sin
distinción sientan amparo institucional, ya que la sensación de desamparo es un
elemento que promueve la violencia.
Esta
defensora de los derechos humanos, catalogó como importante el desarmar el discurso, el moderar el verbo, promover la tolerancia y los
canales de diálogo, de manera tal que todas las personas sean respetadas independientemente
de cual sea su posición política, y un papel fundamental para ello lo tienen
las instituciones como: el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo, el Tribunal
Supremo de Justicia, ya que el país
necesita tener espacios de institucionalidad que le permitan a todas las
personas sentirse iguales ante la ley.
Cuando se
le consultó si en Cofavic han recibido denuncias sobre hostigamiento de
funcionarios del sector público, por haber manifestado ser contrarios al
gobierno del presidente de Nicolás Maduro, en vista que el derecho al trabajo
es también un derecho humano, respondió diciendo: “nosotros hemos recopilado
información sobre los casos que se han visibilizado en ese ámbito, pero no es
nuestro mandato trabajar en esa materia, pero vemos con preocupación las
declaraciones del altos funcionarios del gobierno han aparecido en los medios
de comunicación, desconociendo las leyes laborales, y pareciera que con un
manto de impunidad se pudiera desarrollar la persecución política y esta persecución
política no solo afecta a quienes es el objeto de la misma, sino también a toda
la sociedad, por eso creemos que es necesario que rechacemos esta actuación
independientemente de la posición política que se tenga y ojala se puedan
investigar los diferentes casos y se establezcan sancionen, pero para ello es
necesario que se puedan documentar bien estos hechos.
También se le interrogó si ahora que el gobierno
habla de diálogo, si han sido invitados a dialogar y enfática dijo que no, que
a pesar que las puertas están abiertas, no han sido invitados en ningún
momento.
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